Tradicionalmente, cuando se habla de promoción de la artesanía, los esfuerzos se enfocan en el desarrollo económico de las comunidades, específicamente en la producción y comercialización de sus piezas artesanales. Algo sumamente importante, pero también hay otros efectos menos explorados, que se relacionan con la dimensión psico-social.
Estos años de laboratorios nos han demostrado que la creación colectiva de objetos puede ser una herramienta para generar sentido de comunidad.
¿Cómo nos sentimos cuando hilamos, tejemos o bordamos?
¿Cuándo compartimos el oficio en comunidad?
¿Cómo se relaciona la artesanía con el bienestar?
Nos hace bien conectarnos con los oficios y con nuestras manos, compartir entre vecinas y compañeras, expandir nuestra creatividad, experimentar en torno a lo colectivo y conectarnos profundamente con la naturaleza que nos rodea.
Fomentan lazos protectores de amistad, la colaboración y la equidad de género.
Desarrollan la economía local y fortalecen los oficios desde la cooperación, la creatividad e innovación
Fomentan la conexión y la pertinencia con el territorio y el patrimonio cultural.
Nuestro programa de Laboratorios Creativos ha unido a 15 agrupaciones de artesanas desde La Junta hasta Caleta Tortel, consolidando una red de más de doscientas mujeres en ocho comunas, quienes han trabajado juntas para fortalecer la artesanía regional.
A continuación podrás revisar un recorrido visual por lo que ha sido esta ruta de aprendizaje: